Detente. Respira. Sigue adelante.

Un día te detienes, paras, y piensas ¿ de verdad es esto lo que quieres ?, es decir, levantarte cada mañana y saber lo que tienes que hacer y después de hacer eso hacer otra cosa que también sabes que te tocaba hacer y otra y otra y otra.. y así hasta que llega la noche. Y a la mañana siguiente volver a empezar. Un circulo vicioso que nunca acaba, siguiendo el ritmo del mundo. Me gustaría levantarme un día y preguntarme ¿ qué me apetece hacer hoy? Porque eso, será lo que hagamos, el mundo seguirá tu ritmo. Pero sabes que las cosas nunca podrán ser así porque por mucho que digan, el aleteo de una mariposa no puede provocar un tsunami, pero nadie puede decirnos cuantas mariposas hacen falta para provocarlo. Y de pronto todo te da igual.. al final solo sucede una cosa.. llega el puto invierno.